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Necaxa, por un mejor torneo

Por Arturo Hernández

Después del gran regreso que tuvo el equipo al ascender en un año a la primera división, la expectativa era fuerte para los seguidores que los acompañaron durante todo el trayecto. Al principio la directiva optó por la continuidad, pero con una baja en particular que sería recordada como algo incomprensible para muchos, el perder a Sebastián Maz un jugador adaptado, confiable y pieza muy importante para que el equipo tuviera el éxito deportivo que logró, se le dejó fuera por cuestiones económicas.

Sin embargo si se tuvo el dinero para traer a varios refuerzos que al final no se lograron adaptar del todo. Quizás esa es una de las partes que le duele a la afición, porque si se busca la identidad de un equipo, se debe de contar con ese tipo de jugadores que logran ponerle una nueva cara a la institución, como el siempre bien citado “Jefe” Quatrocchi, que ha conseguido mediante su esfuerzo y profesionalismo convertirse en el actual emblema necaxista.

El otro caso fue el técnico Omar Arellano que no terminó el torneo y casi como broma de mal gusto, su último partido al frente de los Rayos fue un empate en el estadio azteca contra el América, dejando un record de una victoria, dos derrotas y tres empates; para dejar un total de seis puntos de dieciocho disputados. Y para acabar de hacer la situación más tensa se contrata al Ruso Brailovsky dando por terminada la era Arellano, en ese entonces algunos estuvieron de acuerdo con su salida, pero al paso de las jornadas el juego del ruso no terminó de embonar y finalmente se dejó al equipo en una situación de alto riesgo para el torneo que viene.

Sería difícil e injusto decir que la situación estaría mejor o peor de lo que está ahora si Arellano y Sebastián Maz aún pertenecieran al Necaxa, lo único que le queda a la afición necaxista es pensar y esperar que la situación se componga y mientras más pronto mejor. Esta vez Brailovsky tiene la oportunidad de mostrarse con un equipo armado por él, así que por el bien de la institución lo mejor es que de resultados rápido, porque si la desesperación llega a la directiva a las seis jornadas disputadas, va a ser difícil comenzar un proceso a medio torneo con jugadores que quizás no son los idóneos para otro sistema de juego.

Por eso es importante que algunos jugadores se den cuenta que el Necaxa no solo es un año más de trabajo del que quizás se olvidaran en un par de torneos cuando jueguen en algún otro club, lo que se van a jugar en estos partidos es el cariño, la dedicación y apoyo de muchos aficionados necaxistas que quizás no estén en Aguascalientes y anden regados por la república y algunas otras partes del mundo, pero si se dan cuenta hay barras incondicionales de aficionados que no les importa el momento crítico que vive el país con tal de no dejarlos solos, es por eso que hay que dar su mejor esfuerzo antes de que sea demasiado tarde y no haya nada que disputar.

A los rayos no les queda de otra más que dar un buen rendimiento con ayuda de los refuerzos y jugadores que pese a los resultados del torneo pasado, cumplieron con su trabajo y realmente le respondieron al técnico. La parte más complicada de todo esto va precisamente para Daniel Brailovsky, que será el principal soporte del equipo en el que recaerán las criticas y el estado anímico del grupo, la directiva le dio la responsabilidad de estabilizar el barco rojiblanco, solo queda ver que es lo que pasa a partir del próximo 7 de enero.

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