Opinión PR | De aguaceros, inactividad y goles extraños

Por Gerardo Taker.

@GerardoTaker

Después de que este fin de semana Necaxa no viera acción en el Ascenso MX debido a que las condiciones climatológicas que se presentaron en el Estadio Olímpico de Tapachula impidieran la realización del juego programado ante Cafetaleros, sería complicado hablar del rendimiento del equipo en una jornada en la que fue, literalmente, solamente a pisar territorio chiapaneco.

Después de la postergación, el duelo ante el sotanero general ya tiene fecha y aún cuando la dirigencia de la liga anunciara que se disputaría el miércoles 21 de octubre, finalmente se cambió la fecha para disputarse una noche antes, el martes 20 del mismo mes, en el mismo inmueble de Tapachula.

No estuve presente en la ciudad chiapaneca por lo que no podría decir si la lluvia o la cantidad de agua que cayó ameritaría la postergación del duelo, sin embargo, al ver las imágenes de la inundada cancha del Olímpico de Tapachula no puedo sino cuestionarme en qué condiciones se encuentra ese estadio y el drenaje del campo, al tiempo que irremediablemente suenan en mi cabeza las palabras de un discurso que se presenta en el último episodio de la serie ‘Club de Cuervos’, mismo que hace alusión a que todos los estadios del Ascenso son “unos putos potreros”.

Ahora bien, como la actividad de la liga nos abandonó, podría ser buena ocasión para regresarme unos cuantos días hasta el partido que significara el cierre de una tormentosa y siempre insípida Copa MX. Después de haber sido goleados por Zacatepec en el duelo de ida de la serie, los Rayos mostraron un poco de amor propio y vencieron a los Cañeros en el segundo duelo de su llave.

El marcador y el global de la serie son lo de menos y si hay algo en ese encuentro que pudiera ser considerado como extraordinario, es sin duda el gol de Rodrigo Prieto, mismo que significara el empate a un gol en el partido y que derivara de un impresionante error del cancerbero de Zacatepec, Javier Caso, quien en su despeje estrelló el esférico en la cabeza del delantero rojiblanco para que el balón encontrara dirección de gol.

La sui generis anotación de Prieto dio la vuelta al mundo y exhibió de fea manera al guardameta cañero, al tiempo que nos hizo recordar algunos goles ‘raros’ que hemos visto con el paso de los años en los partidos del equipo al que seguimos: el Necaxa.

Entre esos goles que vienen a mi mente están desde luego los conseguidos de tiro libre por Iván Vázquez Mellado, el primero de ellos con un soberbio cobro ante Irapuato en el Estadio Victoria, y el segundo, en una fase de Cuartos de Final enfrentando a Cruz Azul Hidalgo en el Estadio 10 de Diciembre de Ciudad Cooperativa Cruz Azul.

Al mencionar goles de porteros, tendríamos que hablar también del que Federico Vilar, jugando para Atlante le hizo a Necaxa en el Estadio Azteca, en tiempos en los que Adrián Martínez defendía la cabaña del equipo.Sin ser gol, también podríamos recordar el cobro de tiro penal que Alexandro Álvarez le detuvo al experimentado cancerbero del Sao Paulo, Rogerio Ceni en un duelo de Copa Libertadores de América que se disputó en el Estadio Victoria. 

No podríamos olvidar el gol que Gustavo Ramírez de Mineros le hizo a Roberto Salcedo apenas cuatro segundos después de que iniciara el que fuera el primer encuentro en la historia de estos dos equipos. También recuerdo un grave error de Omar Ortíz, quien prácticamente dejó el balón a los pies del delantero en un encuentro contra Jaguares en el Estadio Víctor Manuel Reyna de Tuxtla Gutiérrez.

Si hacemos memoria, desde luego que encontraríamos más fallas de guardametas en partidos de Necaxa, sin embargo por ahora, la que está en nuestra mente, y la que dio la vuelta al mundo en días recientes fue la de Javier Caso, misma que significó el primer tanto de Rodrigo Prieto en Copa MX y su quinto en partido oficial con la camiseta de Necaxa.